LA INTERVENCIÓN DEL PROCURADOR EN LAS RECLAMACIONES CONTRA ENTIDADES BANCARIAS

En la actualidad, uno de los litigios más frecuentes en la jurisdicción civil involucra a dos partes desiguales: los consumidores y las entidades bancarias. 

La relación entre ambas partes ha generado innumerables conflictos, llevando a los consumidores a recurrir a los juzgados y tribunales en toda España. Tal ha sido la magnitud de estos casos que en algunos partidos judiciales se han establecido juzgados especializados en asuntos bancarios. 

Se recuerda, por ejemplo, el caso de las cláusulas suelo o los gastos hipotecarios, donde las entidades bancarias imponían el pago al consumidor mediante una escritura pública. Además, se han presentado casos relacionados con hipotecas multidivisa y productos híbridos como bonos canjeables o participaciones preferentes, entre otros. 

En todos estos años, ha habido un aumento significativo en la litigiosidad civil, especialmente en el ámbito bancario, creando una lucha aparentemente desigual entre los consumidores y las poderosas entidades bancarias. 

La necesidad de abogado y procurador

Antes de iniciar acciones judiciales, los consumidores deben tener en cuenta que, en la mayoría de los casos mencionados, necesitarán la defensa de un abogado y la asistencia de un procurador que los represente. (Aquí podéis encontrar la lista de procuradores que forman parte de ProcuEspaña)

Reclamaciones que buscan la declaración de nulidad de condiciones generales de contratación, como las cláusulas suelo o los gastos hipotecarios, requieren la representación de un procurador. 

 

Reclamación de gastos hipotecarios

En el caso específico de la reclamación de gastos hipotecarios a las entidades bancarias, las personas que firmaron una hipoteca antes de 2019 tienen hasta el 23 de enero de 2024 para buscar la restitución de estos gastos. 

Para este tipo de reclamación judicial, donde se busca la declaración de nulidad de la cláusula que impone al consumidor el pago de los gastos hipotecarios, es esencial contar con un abogado y un procurador. 

La figura del procurador desempeña un papel crucial como enlace entre el cliente, el juzgado y el abogado. Además de enviar escritos al juzgado y notificaciones al abogado, también desempeña funciones de recordatorio de plazos y vencimientos. 

En resumen, la intervención del procurador es fundamental en estos procedimientos judiciales, ya que, incluso en casos de reclamaciones de menor cuantía (menos de 2.000 €), sus funciones son de suma relevancia para el correcto desarrollo del procedimiento judicial. 

 

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